Que la fiesta continue

En Marsella, Rosa, de 60 años, dedicĂł toda su vida a su familia y a la polĂ­tica con el mismo sentido de sacrificio. Todo el mundo piensa que ella es inquebrantable, sobre todo porque Rosa es la Ășnica que podrĂ­a sellar la uniĂłn de la izquierda en vĂ­speras de una fecha lĂ­mite electoral decisiva. Al final, se las arregla bien con todo, hasta el dĂ­a en que se enamora de Henri. Por primera vez Rosa tiene miedo de comprometerse.

Enlaces

Mas Vistas